Krkonoše
Crestas rocosas, hondonadas glaciares, valles con bosques y piedras, sendas acondicionadas para excursiones a pie y en bicicleta, cascadas, prados de montaña y numerosas vistas magníficas —todo esto podrás verlo en las montañas más altas checas:
Krkonoše. No olvides hacer una
excursión a la montaña más alta de la República Checa, Sněžka (1 603 m). Si no tienes ganas de subir, puedes
montar el teleférico que te trasladará desde
Obří důl en Pec pod Sněžkou a la estación Růžová hora, que está a mitad del camino y de allí podrás continuar el viaje a la cima de Sněžka o subir caminando por esta trayectoria final. No dejes de visitar el
manantial del Elba,
las cascadas Pančavský y Labský en la ladera de Labský důl; la cascada
Mumlavský vodopád cerca de
Harrachov también es interesante.
Krušné hory
Las montañas
Krušné hory están situadas en
Bohemia del Oeste y sus lomas, bosques profundos y pastos extensos les proporcionan un carácter inigualable. Podrás dar
paseos a pie y en bicicleta por las inmensas mesetas y llanuras y a la vez visitar
reliquias técnicas, castillos y palacios o
balnearios admirables. Decídete a subir a la montaña más alta de la sierra Krušné hory;
Klínovec. Allí encontrarás un mirador de 24 metros y un hotel ya cerrado. El hotel y el mirador son los edificios más antiguos y situados en la mayor altura en las montañas Krušné hory. Estas montañas son excepcionales también por sus
reliquias técnicas que nos hacen recordar la tradición antigua de la extracción de minerales de hierro y la historia más contemporánea de minas de carbón. En las galerías de minas
Starý Martin, en la ciudad
Krupka, y
Lehnschafter en
Mikulov, cerca de Teplice, podrás visitar unos corredores antiguos de la mina de plata y estaño.
Šumava
Bosques y prados aromáticos, turberas sin fondo, lagos glaciares, panoramas repletos de montañas y colinas; así es
Šumava, que se extiende en
Bohemia del Sur. Aquí también, al igual que en Krušné hory, encontrarás reliquias técnicas. Una genuina rareza en Šumava (y no solo en ella) son dos
canales de navegación artificiales los cuales fueron construidos para seleccionar y transportar madera desde los bosques difícilmente accesibles: Schwarzenberský y Vchynicko-tetovský. Šumava ofrece sobre todo bellezas naturales. Un paseo por
el manantial del río Vltava, los famosos
lagos glaciales, Černé a Čertovo (lago Negro y lago del Diablo), o la turbera
Jezerní slať, seguramente resultará cautivador. Decídete a ascender
la montaña Poledník con su mirador y una preciosa vista panorámica. Una de las rutas más bellas que te guiará por la naturaleza de Šumava es la senda instructiva llamada
stezka Povydří. Comienza en el poblado Antýgl y termina en Čeñkova Pila. Lleva a tu familia a la región popular de recreo que se extiende alrededor de la represa
Lipno. ¿Deseas divertirte? Entonces recorre la singular senda por los copos de los árboles:
Stezka v korunách stromů, donde encontrarás un tobogán y centro de tirolinas.
Jeseníky
En las montañas
Jeseníky, al igual que en otras montañas checas, encontrarás una mezcla del paraíso montañoso con reliquias técnicas. El primer lugar entre las bellezas naturales lo ocupa
la montaña más alta en Moravia y en las sierras Hrubý Jeseník y Nízký Jeseník:
Praděd (1 492 m). El clima que predomina aquí es muy destemplado, la temperatura promedia del año no pasa de 1°C. De todos modos, decídete a visitar este lugar y la vista por los alrededores será tu recompensa. No deberías olvidar la
senda instructiva Bílá Opava, que es una de las más visitadas y más bellas en toda la República Checa. Aparte de la naturaleza encantadora, aquí podrás deleitarte también observando varias
cascadas. Hay varios puentes y escaleras a lo largo de la senda. Entre las reliquias técnicas debemos mencionar la
manufactura de papel en
Velké Losiny, donde han producido manualmente papel por más de 400 años. Otro objetivo popular entre los turistas es la
central hidroeléctrica Dlouhé stráně, en especial el depósito superior que se encuentra a 1 350 m de altitud y es uno de los
7 fenómenos de Chequia.